Hormonas que ofrecen un efecto antienvejecimiento, regulan el desbalance hormonal de la etapa
perimenopáusica, caracterizado por síntomas como;
fatiga, disminución
de energía, disminución del apetito sexual, ansiedad, insomnio, irritabilidad,
aumento de peso, además de los clásicos bochornos, sudoración nocturna,
resequedad vaginal, osteoporosis.